La empresa se llamaba Doorbot, luego la renombraron Ring. Ellos son los que crearon un portero eléctrico con cámara conectado a la web que permite responder a quién tocara el timbre desde un smartphone. Desde cualquier lugar del mundo. A continuación, algunas de las aventuras de Ring en América Latina.
Mientras que los equipos de Ring ya se venden en las cadenas más importantes de Chile, México y Panamá, en donde encontró mayores dificultades fue en su propio país, la Argentina. “Esto lo digo con mucho dolor, porque me gustaría que aquí Ring esté brillando, algo que no tengo dudas que pasará tarde o temprano. Pero en el país a veces las cosas son más difíciles”, comenta. Para empezar, reconoce que los argentinos están detrás de Colombia o de México, tanto en términos de conectividad o en acceso a la tecnología. Sin embargo, el mayor problema es la mentalidad de negocios y el espíritu emprendedor con el que se encontró. “Ring es un producto que cuando lo ves, deslumbra. Entonces, cuando lo llevaba a otros mercados, inmediatamente se preguntaban cómo iban a hacer para venderlo: el display, los precios, la comunicación. En la Argentina, en cambio, cuando ven lo novedoso, sólo se preguntan cómo van a acomodarse para poder conseguirlo, porque las trabas para importar y las regulaciones impuestas siguen siendo muchísimas. El desgaste es tan grande que sólo se apuesta por lo que ya funciona, en conseguir lo que seguro se va a vender. ¿Quién quiere innovar si todo lo que encuentra son trabas?”, se sincera.
Amazon -lease Jeff Bezos- compró Ring a fines de febrero de este año por US$ 1.000 millones, según informó la agencia Reuters.
Copiado de Quién es el argentino detrás de la startup de u$s 1000 millones que “enamoró” al hombre más rico del mundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario