sábado, octubre 08, 2011

Yo, Sarmiento


Yo, Sarmiento es una biografía de Domingo Faustino Sarmiento escrita por Ricardo De Titto, historiador e investigador. Fue publicada en Mayo de este año por Editorial El Ateneo.

He leído en Perfil que en Yo, Sarmiento, el Maestro de América toma la palabra y transita su azarosa existencia, la que se confunde con los destinos de la Nación. Responde –como lo hizo en vida– a todas y cada una de las críticas sobre su acción política. Sin dudar confronta a Rosas y Urquiza, a Alberdi y Hernández, a Mitre y Roca. Muestra su estatura de estadista, que la Argentina extraña.

En una Librería Digital encontré este comentario de una lectora sobre el libro de De Titto:
Si bien soy abogada, hace ya unos años he resuelto dedicarme al camino de las letras y actualmente estoy trabajando en mi tesis doctoral que tiene como eje central a Sarmiento y su Facundo. Como podrá imaginar, desde hace unos años estoy dedicada a estudiar todo lo que cae en mis manos sobre "nuestro" Don Yo, incluyendo una buena cantidad de sus biografías. Le confieso que cuando apareció su libro, y teniendo en cuenta su considerable extensión, pensé: "Debo leerlo, claro, pero sólo los capítulos más relevantes para mi tesis". Pues acabo de terminar de leer TODO su libro, cada capítulo, cada página y cada palabra. Y sólo lamento no tener más para leer, aunque me queda el consuelo de poder releerlo tantas veces como sienta ganas. Me cuesta poder expresarle todo lo que usted ha logrado con este libro. Y no es que Sarmiento ho haya sido merecedor con anterioridad de excelentes biografías. Pero creo que usted ha sabido fundir mágicamente sus propias palabras con las del prócer, a punto tal que, en la "borrachera" de placer que el libro produce, se volvería difícil discernir cuáles son unas y otras si o fuera por la cuidada edición. A mi entender, usted encontró el tono justo, las palabras precisas y la valentía para presentar la vida de un hombre que muchas veces los elogios excesivos han distorsionado y que las críticas miopes no han sabido comprender. Un hombre, con todo el coraje, las miserias y el romanticismo de quien sin lugar a dudas amó a nuestra patria como muy pocos. Usted sin lugar a dudas ha estudiado su inabarcable vida con toda seriedad, pero también ha logrado sentir como probablamente haya sentido Sarmiento Acabo de cerrar el libro, aún embargada por la emoción que producen las páginas finales (¡es como si Sarmiento "acabara de morir" en este momento!), y le mando ya mismo este mail, para evitar que el tiempo borre irremediablemente las sensaciones despertadas. Disculpe usted mi atrevimiento, pero siento que he estudiado tanto a Sarmiento que me animo a decirle que usted ha logrado escribir justamente la biografía que él mismo hubiera deseado. Para Don Yo, eso dice todo. Si no lo considera inconveniente, me gustaría mucho tener la oportunidad de poder comentarle brevemente mi proyecto y poder conversar acerca de algunos aspectos de su obra que ya he recomendado a muchas personas, sin vacilar. Una vez más, mis más rotundas felicitaciones. Cordiales saludos.
Después de tanta alabanza, y de la admiración que tengo por Sarmiento, no me queda más que leer este libro.

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