domingo, agosto 10, 2014

Nuestra izquierda actual

Tratándose de Chávez cualquier desatino o exabrupto era natural y hasta lógico, pero uno esperaba que otros mandatarios de Sur América, hasta ahora respetuosos de la democracia, tuviesen una conducta coherente con sus orígenes. Por ejemplo ante conflictos internacionales como el que actualmente se desarrolla entre el ejército de Israel y el movimiento terrorista Hamás. No son el estado judío y Estados Unidos los únicos que califican a Hamás como terrorista, lo han hecho la Unión Europea, Canadá y Australia. Human Rights Watch y Amnistía Internacional han acusado a Hamás de crímenes contra la humanidad. Pero más allá de esos señalamientos, se sabe que Hamás tiene en su carta fundacional la destrucción de Israel y es además un movimiento fundamentalista islámico que discrimina y oprime a las mujeres, envenena con odio la mente de los niños y persigue la obligatoriedad universal de abrazar el Islam como religión. ¿Puede entenderse que tres presidentas mujeres como Cristina Kirchner, Dilma Rousseff y Michelle Bachelet condenen a Israel en su lucha contra el fanatismo terrorista de Hamás? ¿Tiene sentido que un socialista genuino como José Mujica, presidente de Uruguay, embista contra Israel -la única, democracia del Medio Oriente- para apoyar a un grupo fanático y violador de los derechos humanos como es Hamás? De Evo Morales mejor ni hablar pero ¿Ollanta Humala tenía también que plegarse a la moda de lo que ahora parece políticamente correcto que es condenar a Israel?

1 comentario:

Ceo dijo...

Adhiero totalmente a la posición de Israel contra el terrorismo de Hamás. No puedo entender el irracional y absurdo apoyo de presidentes latinoamericanos al terrorismo fanático, eso habla de ellos como decadentes e ineptos morales, así está el Mercosur, un mamarracho inexistente!!