jueves, abril 23, 2015

Nuestra Economía de mal en peor

La decisión de Néstor Kirchner de "inflacionar" la economía es una de las peores marcas que deja el período. Se suma a un dólar corroído por esa misma inflación, la traba a las exportaciones de la industria y de las economías regionales, las restricciones a la importación que limitan esas mismas exportaciones y restringen la producción al mismo mercado interno. Tenemos un déficit insostenible financiado con emisión y un Banco Central que absorbe con tasas -también insostenibles- los pesos de esa emisión. La Argentina no crece y está cada vez más encerrada sin poder integrarse en las cadenas globales de producción, distribución y desarrollo tecnológico.
Para ponderar el tamaño de la mala praxis de este último período, un ejemplo interesante es el de la política energética: la idea de desacoplar los precios de la energía respecto de los precios internacionales impidió que el país viviese el extraordinario boom de inversión petrolera de la década; en ese período -pese a que el precio del petróleo en el mercado mayorista interno fue sustancialmente inferior al precio internacional- nuestros productores agropecuarios pagaban el gasoil al mismo precio que un productor de los Estados Unidos. Ahora que los precios del petróleo bajaron, un nuevo desacople remunera a las petroleras por encima del precio internacional, pero esta vez los productores agropecuarios deben pagar el gasoil a un precio sustancialmente mayor que el de sus competidores en los Estados Unidos y, encima, los nuestros reciben un precio 35% menor por las retenciones.
En síntesis: un país que necesita divisas se da el lujo de perder áreas sembradas y reducir sus exportaciones. Entretanto remunera por demás a productores petroleros que no van a usar ese dinero para invertir porque no tienen señales de política pública de largo plazo: un regalo del campo a los petroleros que no subsana la pérdida de inversiones pasada, pero limita la expansión agrícola. Toda una genialidad.
Copiado de Cómo evitar nuevos fracasos económicos, de Luis Rappoport.

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