¿Por qué no se rompe con la podredumbre del pasado?
Eso se pregunta Hector Leis en Elogio de la traición. Y elogia a los "traidores" que hicieron el pacto de la moncloa en España. "Esos héroes, cada uno en su campo de acción, traicionaron los juramentos de lealtad con su pasado y construyeron una democracia moderna como España nunca había conocido." Y pide que aquí tanto montoneros como peronistas traicionen sus principios y que "digan que la mayoría de los líderes peronistas han sido traidores al espíritu republicano y a la democracia, y que los honestos tuvieron poco lugar", y también que "digan que la generación del 60, en lugar de reforzar la democracia de los gobiernos de Frondizi e Illia, se preparó ideológicamente para hacer la revolución a cualquier precio. El golpe militar de Onganía funcionó como justificación de intenciones que eran anteriores, por eso a nadie sorprendió que la violencia revolucionaria continuase en 1973. Que digan en voz alta que nuestros líderes quisieron que nos pusiésemos contentos cuando Videla dio el golpe, mientras ellos se marchaban al exterior para preservarse."
Y dice que necesitamos traidores, por que "es hora de que todos juremos lealtad a la Constitución tal como está y la dejemos en paz por un buen rato. Pese a sus posibles defectos, ella es hoy el único factor unificador, incluyente y reconciliador que tiene la Argentina".
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