Perón bancó a los Montoneros y a buena parte de la gloriosa JP hasta que el 1 de mayo de 1974 se hinchó las pelotas y delante de todos los sindicatos que llenaban la Plaza de Mayo y de todo el pueblo argentino que seguía el acto por televisión, les gritó desde el balcón que eran unos estúpidos imberbes y los echó a la mierda.
Lo interesante de esta historia es que muchos de los que entonces fueron echados de la Plaza siguen hoy venerando al General como si aquella tarde de los “imberbes y estúpidos” nunca hubiera ocurrido y como si la Triple A que inició la masacre hubiera llegado de Marte. Esto lo puede comprobar usted fácilmente, amigo lector, apersonándose en Carta Abierta o en cualquier otro geriátrico cercano a su domicilio.
Insisto, como esta es una página de humor político y no me pienso meter en ningún quilombo, mejor paramos ya mismo y dejamos este temita para cualquier otro momento.
Copiado de Los fachos de antes usaban gomina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario